(Radiante 2011 a todos)
Cuando vez que uno hace trámites se vuelve loco. Vas, entregas los papeles que tienes que entregar y resulta que falta algo. Al siguiente día entregas lo que faltaba, y te exigen otro documento. Por momentos parece que nunca terminarás, dicen que hay que tener paciencia y creo que esa no es una condición que me caracterice (me desespero fácilmente).
Eso de la desesperación me pasó con la Visa canadiense, y admito que fui a hacer mi trámite muy tarde. Iba a entregar documentos y cada día me pedían uno nuevo. Incluso me solicitaron análisis clínicos de un día para otro. Por fin me llegó la confirmación de la visa y únicamente faltaba esperarla. Pasaban los días y la visa no llegaba, ya pensaba que nunca iba a tener mi intercambio porque tenía el tiempo encima. La visa llegó 3 días antes de empezar mis clases aquí en London, Ontario (donde hace un frío tremendo). Estoy ahora emprendiendo esta experiencia de ser una Exchange Student, espero que sea excelente para que pueda compartirles más de mis historias y vivencias.
En la vida nos toca hacer un sin número de trámites y tenemos que aguantarnos, así son las cosas. A veces no nos queda de otra más que disfrutar la experiencia desde que iniciamos trámites.
Expresate
Publicar un comentario