martes, 8 de diciembre de 2009

Gotta play with fire

Traté de ayudar a una persona que quiero pero aquel ser simplemente decidió no hacerme caso y comenzar a encapricharse.

Y he llegado a una conclusión, si la persona está conciente de su problema y no se ayuda a sí misma a mi no tiene por qué importarme. Se escucha egoísta pero en realidad ¿para qué esforzarse si al final me voy a perjudicar y la ayuda que brindo no va a ser nunca agradecida?

Basta de ser indulgente en exceso, soy una persona muy tolerante pero ya lo decía Kant, la tolerancia tiene sus límites.

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